jueves, 15 de diciembre de 2016

Posted by Claudio Dennis Arriojas |



El folklore es la particularización temática de los estudios culturales, evidentemente que parten desde al periferia y la negación, sitio al que fue relegado por la “Cultura Académica Tradicional”, lo anterior servirá luego para la búsqueda de una personalidad y metodología científica propia, que le permita desarrollarse como ciencia.


Ahora bien, con respecto a la discusión sobre la naturaleza del concepto, creo que sólo podemos dar nuestra opinión, pues los aportes mencionados en los ensayos abordan grandes gamas de “La Cultura”, por no decir la totalidad. La cultura abarca mucho más que las bellas artes, encontrando en su descripción tradicionalidad, orabilidad en su transmisión, estereotipia, funcionalidad, ubicabilidad y anonimato, mismos conceptos que le achacamos al folklore.

A mi juicio la dicotomía folklore/cultura no es tal, por lo que otros términos como “culturas populares” carecen de sentido, pues el concepto de pueblo no es ajeno a ningún ser humano, la cultura es patrimonio exclusivo del hombre y, el uso político de dicha palabra olvida que fueron aristócratas los que acuñan el término, usando por método el engaño y uso de asambleas populares en la antigua Roma.

Interrogando a Juan José Prat: ¿No es folklore las tradiciones de la aristocracia en su cena?, ¿Por qué?, ¿Se rigen esas costumbres por reglas de educación formales?, al aceptar la dicotomía folklore/cultura, definirla por término de posiciones políticas o capacidad económica, así como el carácter peyorativo que la Academia Tradicional ha dado al folklore, ¿No estamos aceptando que las tradiciones “populares” no forman parte de la cultura?.

El momento histórico en que se desarrollan los estudios del folklore exigía el nacimiento de este, un mundo donde las posiciones estaban marcadas, las Academias estaban aún impregnadas totalmente por la costumbre absolutista y donde el “purismo cultural” estaba a la orden del día, sin embargo, hoy día se hace necesario reconceptualizarlo, llevarlo a un panorama de democratización académica, de abandono de éstas por parte de las élites, de globalización tocando a la puerta de mansiones de concreto armado, de casas de cartón, de igloos, chozas, cuevas y pirámides. La cultura es folklore.  

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